
Si ya pasaste por esto, sabes lo horrible que es ser acusada por algo que no hiciste.
Y así actúan muchas mujeres con sus maridos. Son muy celosas y posesivas.
Recuerdo que mi primer novio me traicionó. Cuando lo descubrí, terminé la relación inmediatamente, pero aquello me persiguió en las relaciones futuras.
En aquella época, no me daba cuenta de eso, no tenía esa madurez, pero debido a aquella primera decepción yo era demasiado insegura, a veces llegaba a ser enfermizo.
Las relaciones después de la primera fueron terribles…
Quería saber toda la rutina, llamaba toda la noche (eso que en la época no existía el celular…), caminaba en la calle mirándolo para ver si miraba a otra mujer, si mirase, ahí comenzaban las peleas.
Una amiga una vez me contó que era tan celosa y posesiva con su esposo que había llegado al punto de seguirlo.
Él nunca la había traicionado, pero ella lo acusaba, hacía escándalos en la calle, en el trabajo de él, en la casa…
Llegó un punto en que él comenzó realmente a traicionarla…
“Ya que me acusan tanto por algo que nunca hice, entonces voy hacerlo para merecer”, dijo él.
Así es amigas, este asunto de oler la camisa de él, llamar a toda hora para controlar, y hacer acusaciones injustas puede tener un efecto catastrófico en tu relación, y completamente contrario a lo que anhelas.
No permitas que las relaciones frustradas del pasado afecten tu futuro, no cargues ese equipaje contigo.
La confianza es la base de un matrimonio bendecido. Sin ella es muy difícil que un matrimonio se consolide y dure.
En mi opinión, la fidelidad hoy en día es algo rarísimo de encontrar.
Puede existir amor, pero el amor sólo no es suficiente para impedir que alguien traicione.
Entonces tú preguntas: “Nanda, espera, primero dices que no debo acusar, ni ser celosa, ni posesiva, pero después dices que es difícil que exista fidelidad aunque exista amor, ¡ no estoy entendiendo!”.
¡Es un arma de doble filo, amigas!
Aquí comenzaremos una tarea invisible… Una lucha, ¡una guerra!
Mira bien.
Sólo un hombre verdaderamente de Dios puede ser realmente fiel.
Él entiende el peligro del pecado y se aparta.
Él sabe que su Señor observa incluso sus pensamientos.
Él odia el pecado, porque ama y teme a su Dios.
Si tu marido no tiene este temor aún, entonces está será tu lucha.
Desafío - Tarea 24
Si tu esposo ya es un hombre temeroso de Dios, no pienses que estás libre de esta tarea.
Recuerda ser sabia y protegerte, pues enfermedades de transmisión sexual son un riesgo que no mereces correr.
Señora Nanda siempre estoy leyendo su blog y me ha sido de mucha ayuda.
ResponderEliminaren momentos muy dificles Dios la bendiga.
Realmente es un buen consejo y lo voy a colocar en practica
ResponderEliminarbuenas noches señora :yo era una persona haci una vez tube una mala experiencia en una relaciòn ,desde hay comence a desconfiar de todos inclucibe ,Dios embio otro hombre de el en mi camino y por miedo a no sentir otra desepcion o por pensar que nueva mente me pasaria lo mismo echaba todo a perder ,,,,la verdad tuve que cambiar yo mi forma de penzar ,,,,haci logre sacar esos pensamintos que invadian mi mente
ResponderEliminar