Tarea 7 del Desafío – 40 Días para transformarse en una Mujer más Linda

Algunos años atrás, miembros, obreros, pastores y obispos de la Iglesia Universal hicieron un propósito por una de nuestras iglesias en Londres que corría el riego de ser cerrada si no conseguíamos el dinero necesario para comprarla.

El propósito fue subir el Ben Nevis, la montaña más alta del Reino Unido que queda en Escocia. Y para empeorar la situación, estábamos en invierno.

Nunca olvidaré ese día!

Recuerdo que un día antes de la subida, los guías nos dieron todas las coordenadas…

·       No lleven mucha ropa.

·       Solamente una botella de agua.

·       Si llevan mochilas, nada de excesos.

Al escuchar de mi marido esta información, aún sin hablar nada, dentro de mí estaba…

“¿Qué es esto?! ¿Cómo puede ser?! ¿En pleno invierno y con poca ropa? ¿Sólo una botella de agua?”

Y allí fui a prepararme para la subida...

Vestida con:

Un pantalón por dentro, otro pantalón de nylon bien grueso (y pesado), 3 camisetas de manga larga, un saco y una chaqueta de nylon (toda esta ropa probó que era un gran exceso).

En la mochila:

·       Dos botellas de agua (“Me voy a pasar todo el día subiendo y bajando de esa montaña, ¿cómo voy a hacer con solo 1 botella?!” ponderé…)

·       Unas 6 barritas grandes de chocolate energético (“En caso de tener mucha hambre”, me dije a mí misma).

·       Bolsita de primeros auxilios, con todos tipos de remedios, curativos, etc. (“Si alguien precisa”, pensé)

·       Paquetes de un gel que al ser agitado se calentaba (“Puedo necesitar”)

·       Y otras cositas innecesarias, da las cuales ya ni me acuerdo…

Pero de una cosa no me voy a olvidar… Qué mochila pesada!!!

Me cuidé de no dejar que mi marido tomara la mochila, pues con seguridad me diría que dejara todo!

Aún no estábamos a 5 minutos de subida, cuando me di cuenta de mi error, y que error!!!

La mochila pesaba demasiado y si no fuese por mi marido y Sam, un obrero enviado de Dios,  no hubiese conseguido llegar hasta el final, pues los dos la cargaban por mí.

Mi obstinación  falta de consideración con la dirección dada por los guías, hizo que estos dos “ángeles” sufriesen las consecuencias.

Este ejemplo me hizo pensar en nuestro próximo desafío…

7ª Tarea para Transformarse en una Mujer más Linda

“Analizarás hoy cuáles son las direcciones, consejos y coordenadas que has recibido en la iglesia y no les has dado oídos”

Sabes cuando el pastor te dice: “Hija, perdona! Deja ese rencor a un lado!” Pero tal vez, tu estés pensando, aún sin decir nada… “Pastor, mi caso es diferente, usted no sabe cuánto duele!” Allí estás llenando tu “mochila”.

El hombre de Dios te dijo: “Piénsalo bien, aún no conoces a ese muchacho lo suficiente para casarte”, pero tú piensas “Yo lo amo y es él a quien quiero, y punto final!” Allí estás ignorando las coordenadas del “guía”.

Recuerda, rechaza las instrucciones venidas de Dios y carga el peso innecesario en tu vida, y te transformarás en una mujer frustrada y desilusionada.

Dale oídos a tu “Guía”, quita ese peso de tu “mochila” y estoy segura de que te transformarás en una mujer más linda y feliz.

PD: En la subida tuve que sacarme parte de las prendas porque vi que no eran necesarias, y de toda la parafernalia que tenía en al mochila, casi nada fue usado.

Ah! También había una fuente de agua cristalina en donde se podían recargar las botellas… que fue la mejor agua que ya bebí en mi vida!

 

Junior y yo en la cumbre del Ben Nevis