jueves, 1 de septiembre de 2011

El día en que desistí…


 

“Junior, vamos a llegar tarde otra vez, por favor, sal enseguida del baño!” Grité en la puerta del baño por tercera vez…

“Estoy yendo”… él responde con una voz somnolienta de quien está realmente dormido en la ducha y no tiene ninguna intención de salir más temprano.

“Todos los domingos es lo mismo, estamos siempre atrasadas para la reunión en la iglesia, me siento tan avergonzada porque somos obreras, y deberíamos ser las primeras en llegar, no al revés!” – Le digo a su madre reclamando de la situación.

En aquel tiempo Junior y yo aún estábamos de novios, y él muy raramente iba a la iglesia, generalmente los domingos. Yo había sido levantada obrera en la iglesia y acostumbrábamos a ir todos juntos, con su madre y su hermana, que eran obreras también.

Aquel día yo había alcanzado mi límite. Recuerdo estar tan irritada y cansada, pues todos los domingos era lo mismo, esperar y esperar que terminase su baño y se arregle para ir a la iglesia con nosotros.

Los pastores e incluso el obispo de la iglesia sabían cuál era nuestra situación y la razón por la cual llegábamos tarde los domingos, pero aun así me sentía avergonzada…

No me sentía digna de vestir mi uniforme, la reunión más importante, domingo a la mañana llegábamos siempre tarde!

Aquel día recuerdo estar con mucha rabia, todo lo que quería era llegar temprano a la iglesia.

“¿Sabes qué? No podemos más aceptar eso! Hoy lo dejamos. Nos vamos, él puede quedarse en la ducha”, dije.

“Junior, nos estamos yendo! Ganaste! Te puedes quedar ahí el tiempo que quieras!” Dije en la puerta con tanta rabia que creo que la gente podía ver el humo saliendo de mi nariz y orejas! Di la vuelta y me fui al automóvil, tan enojada con él que no podía pensar…

Estábamos casi llegando a la autopista cuando mi suegra habló por primera vez…

“Fernanda, no podemos olvidarnos de quien está por detrás de esto… El diablo lo está usando. Mira con la rabia que estamos, yo me pregunto si Dios se va agradar de que lleguemos temprano a la iglesia de esta forma, por no mencionar que él es solamente un alma de la que desistimos…”

Ohhhh… cómo la admiro… Ella sabía que estaba enojada, entendió el motivo…  No me apuntó con el dedo  (tal vez si yo estuviera en su lugar…), sólo esperó el momento indicado y habló con calma, para que yo pudiese asimilar en medio de la ceguera.
Su voz y sus palabras comenzaron a penetrar aquel enojo y pude ver la trampa del diablo…

“Tienes mucha razón!”, dije mientras daba la media vuelta.

Llegamos a casa, ellas esperaron en el auto mientras yo entraba para llamarlo.

Adivinen qué?

Junior estaba fuera de la ducha y arreglado!

“Oh no, volvieron!” dijo, decepcionado, cuando me vio.

“Sí, volvimos por ti!”, respondí con una sonrisa, porque ahora podía ver que todo el enojo que había sentido se lo estaba devolviendo al diablo.

“El diablo debe estar ahora mismo indignado y pataleando en el piso de pura rabia!”, pensé.

Fuimos todos juntos a la iglesia, y ni preciso decir que llegamos tarde de nuevo, pero esta vez fue diferente, ya no estaba enojada, yo estaba feliz, y sabía que el diablo estaba muy, pero muy airado!!!

Esta fue apenas una batalla que vencí antes de llegar a donde estoy hoy.

Muchas otras veces quise desistir.

Muchas veces lo vi como un caso perdido, todo parecía tan imposible…

Hoy cuando lo veo en el altar predicando y salvando almas, entiendo la razón por la cual el diablo quería hacerme desistir!

Estás luchando por alguien?

Parece un caso perdido?

Parece imposible?

No desistas! Es posible y va a suceder!

7 comentarios:

  1. Este post renovó mis fuerzas para luchar por mis familiares que aún no tuvieron un encuentro con el Señor Jesús... No podemos desistir nunca!!

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  2. es fuerte esta experiencia, por mas imposible que se vea el salvar una persona, que aparentemente no quiere nada con Dios, debemos verla con los ojos espirituales, sera un alma que se fijara en Dios para siempre... muy fuertee

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  3. Buenas tardes Sra.
    Es fuerte, muchas de las veces desistimos cuando estamos tan cerca de la bendición. El diablo coloca situaciones para sacarnos del Espíritu; pero tenemos que ser fuertes y nunca desistir de nuestros objetivos,porque hay una certeza de que veremos los resultados. Besitos...

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  4. en este mensaje nos enseña que nosotros tenemos que ver bien nuestra actitudes que no podemos dejarnos llevar por la rabia recordemos que a DIOS no le agrada eso ejemplo.que hacemmos de llegar temprano a la iglesia si antes de salir para ya en la casa hubo una discucion y asi uno sale para ir a la reunion para ayudar a la gente que necesita como podemos hacer eso no estamos en esa parte agradando a DIOS alcontrario lo estamos avergonzando por nuestras actitudes

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  5. Este post es fantastico, que situacion difiicil, si no hubiera seguido perseverando en el, no estarian en el altar, pero tambien veo que en un momento tomo una decision equivocada, que si hubiera sido terca, el no estaria hoy en el altar, solo es escuchar la voz de Dios en el momento cierto.

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  6. Excelente...
    Me gusta mucho el Blog de la Sra Nanda, me identifico mucho con ella y leer sus palabras de Fe me inspiran mucho para seguir luchando...
    Leannys...

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  7. Es muy fuerte. Y me ah pasado, momentos donde uno solo se enoja y va para la iglesia asi, ya fuera de Espiritu pensando que hasta las personas lo hacen a proposito, pero en realidad por detras de todo eso esta el diablo riendo de nuestras actitudes, no puedo olvidarme, que la guerra es Espiritual y que detras de las personas hay almas y no puedo desistir de ellas.

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